miércoles, 18 de abril de 2012

La Trova de Oro bajo el cielo de Cuba



Una charla amena y de mucha sapiencia musical tuvo lugar en el espacio “Bajo el Cielo de Cuba”, de la Emisora 103.1 FM de la UADY, donde su conductor y animador principal, el licenciado Roberto MacSwiney contó como invitado principal con el periodista, musicógrafo y locutor, Lino Betancourt Molina, un cubano a quien se le considera entre los más profundos investigadores y conocedores de la música y la trova de ese país. El también conferencista, nacido en la ciudad de Guantánamo en 1930, conoció de primera mano a leyendas indiscutibles de la música cubana como Ñico Saquito y los integrantes del famoso trío de Miguel Matamoros, cuyas composiciones han dado gloria a los ritmos del Caribe en todos los escenarios del mundo. Es precisamente la presentación de dos documentales de la serie "La Trova de Oro" sobre la música de la mayor de las Antillas, la razón de la visita del señor Betancourt en Yucatán. Cynthia Biestek y Rubén Gómez Neyra, quienes también estuvieron presentes en el programa de MacSwiney, fueron los productores y directores de estos dos trabajos audiovisuales, ellos han plasmado en estos materiales, el testimonio y la fuerza de la música y las personalidades de estos grandes músicos que han dejado de ser solamente referencias en el territorio sonoro de la isla antillana, para convertirse en pilares de los géneros de la música  en todo el orbe.
Los trabajos de la productora independiente PositivationFilms, agrupados sobre el nombre “Trova de Oro” constituyen una serie de cortos documentales sobre la trova santiaguera que contienen testimonios de importantes figuras de la música cubana, como son Omara Portuondo, Eliades Ochoa y el propio Lino Betancourt entre otros no menos importantes. Estos interesantes materiales audiovisuales serán presentados en el Teatro Armando Manzanero de la ciudad de Mérida, durante la Primavera Cultural, jornada que organiza la Secretaria de Cultura de Yucatán por estos días, y serán comentados en un panel donde estarán la estadounidense Cynthia Biestek, Rubén Gómez Neyra, Lino Betancourt y Roberto MacSwiney, quien sin dudas, es el más importante promotor de la música cubana en Yucatán.

lunes, 16 de abril de 2012

Jonathan Harrington, un poeta yuca-gringo


Jonathan Harrington, escritor y poeta
Jonathan Harrington es un poeta estadounidense nacido en la Florida hace poco más de 50 años, pero él se declara orgullosamente yuca-gringo. Desde hace más de 14 años vive en Xpakay, un hermoso paraje de Yucatán en México, cercano al poblado de Ticul, lejos del bullicio y la polución ambiental. Para este poeta, quien vivió algunos años en Nueva York, vivir lejos de la ciudad, renunciando a los beneficios de la vida moderna no es un sacrificio, y rechaza con toda modestia que sea un acto de rebeldía, en tanto que afirma, haber regresado a su hábitat natural, y dice escapar a la vida moderna que a través del desarrollo de la tecnología y las comunicaciones como la televisión, la telefonía celular, las llamadas redes sociales y un sin número de aparatos, está entorpeciendo la comunicación entre las personas más cercanas, para crear un círculo de amigos virtuales, que por antonomasia resultan “falsos”, según sus palabras. Jonathan nació en el campo en el seno de una familia de citricultores donde se originó y creció su amor a la naturaleza. Y no es que el poeta, escritor de novelas y relatos renuncie al uso de los avances tecnológicos, sino que rechaza la idea de la incomunicación diaria con la gente de su entorno, a costa del vínculo con personas que se encuentran muy lejos, como ya se ha hecho costumbre entre nuestros contemporáneos. Jonathan ha encontrado en el contacto directo y natural con las personas que le rodean un estilo de vida mucho más acorde con sus sueños y aspiraciones como ser humano.
El último poemario de Jonathan Harrington no pudo tener mejor nombre para reflejar esa voluntad de comunicarse con su entorno “Aquí”, un cuaderno de poemas bilingüe  editado por JKP Publishing, de St. Louis, Missouri, en el que aparecen dibujados de manera a veces lírica y en otras narradas como pequeñas historias, el entorno por donde transcurre la existencia del poeta con todos sus matices, colores, luces y sombras. Cada poema del libro es un documento inalterable de la vida de su autor: aquí estoy/ esta es mi vida/este cuarto/austero como celda (aquí en esta ciudad/ a miles de kilómetros/ de donde nací) / con montones de libros en el piso; / recibos, documentos oficiales/ y en general papeles que definen mi existencia”. Los poemas que aparecen en “Aquí” poseen sin dudas la virtud de situarnos en entornos cotidianos que pudieran ser los de cualquiera de sus lectores, sin embargo, la manera en que el autor se acerca a esa realidad los hace exóticos, y a la vez transparentes y familiares, pues no hay dudas que habitan en la memoria de cualquiera de nosotros.